El hecho representa una pérdida millonaria. Atentado contra la vía férrea de Cerrejón causa graves daños y paraliza operaciones

 Un nuevo acto de sabotaje criminal sacudió la madrugada de ayer miércoles al departamento de La Guajira. A la 1:00 a.m., una potente carga de dinamita fue detonada en la vía férrea de la multinacional Cerrejón, específicamente en el sector de La Garita, a la altura del Resguardo Indígena 4 de Noviembre, en jurisdicción de Albania. El estallido, que se escuchó a varios kilómetros a la redonda, causó daños severos a la estructura de los rieles y la bancada de la vía, dejando el corredor férreo totalmente inhabilitado. El impacto de la detonación fue de tal magnitud que se ha reportado el desprendimiento de rieles y afectación en el terreno, lo que obliga a una reparación de alta ingeniería que podría tardar varios días. Este atentado ha logrado su objetivo más oscuro: paralizar por completo el transporte de carbón desde la mina hacia Puerto Bolívar. A esta hora, los trenes se encuentran detenidos, lo que representa una pérdida millonaria para la economía regional y nacional, además de poner en riesgo la estabilidad laboral de cientos de trabajadores que dependen de esta operación. El impacto más grave es el psicológico y social. Las familias del Resguardo 4 de Noviembre despertaron bajo el estruendo de la guerra. “No es solo el daño a la vía, es el miedo de vivir entre explosivos”, manifestaron líderes locales. Este acto cobarde utiliza el territorio ancestral como escenario de violencia, violando la tranquilidad de las comunidades wayuú. Aunque se presume que el ataque es obra del ELN en el marco del cierre de su ‘paro armado’, las autoridades aún realizan inspecciones técnicas para descartar la presencia de más artefactos explosivos en la zona. La Décima Brigada del Ejército ha desplegado unidades para asegurar el perímetro y permitir que los equipos de reparación de Cerrejón inicien labores. Este ataque no es contra una empresa, es un atentado contra el desarrollo de todo un Departamento que hoy se ve sitiado por el terrorismo. Se exige una respuesta contundente del Gobierno nacional ante esta escalada de violencia que parece no tener freno.