Nunca es tarde para morir en abril cuando se muere bien y se muere bien cuando bien se vive.
Tuvo las condiciones todas de las grandes mujeres Villanueveras, cumplió su ciclo con inefable grandeza. Heredó un pasado, construyó un presente y nos legó un futuro. Inspiró su vida en su ancestral herencia, provenía de distinguidas familias Villanueveras. Don José Manuel Martínez y doña ROSA QUINTERO de MARTINEZ -viejos patriarcas, adustos, generosos, laboriosos. Don José Manuel llegó a Villanueva desde muy joven y doña Rosa provenía de familias santandereanas. Hicieron de ella su verdadera patria, la amaron como a nadie, jamás la hollaron, la engrandecieron con su laboriosidad y su entereza.
Doña Blanca Martínez de Dangond, construyó como pocas el presente de su vida, ella rindió culto a esos padres laboriosos, edificó una vida bien, le sirvió a Villanueva, le sirvió a su familia, le sirvió a sus amigos y amigas, es decir le sirvió a Dios. Era una mujer amable, de un carácter y de un temple para hacer negocios-lo heredo de su madre-era noble, sincera, amiga, fue una buena hija, inmejorable hermana, inigualable esposa y compañera, una madre irrepetible o si no que lo digan sus hijos que con el dolor y la congoja sentirán la ausencia de su consejera y amiga: José, Hernando, sirty y Daniel. Como empresaria del campo, mantuvo siempre definidos conceptos de rectitud e integridad. Al lado de sus hermanos don Juan Manuel y Doña Pacha Martínez Quintero, mantuvo una hermandad y una amistad que solo hoy la separa.
Muchas veces la observé caminar pausadamente y muchas veces también me pregunté al observarla si era posible encontrarle un solo defecto a esa señora tan querida que desde niño percibí como una señora de bien al lado de sus hijos que han sido mis amigos en todas las épocas, especialmente Daniel con quien me unen lazos de hermandad. Debo confesar que racionalice muchas veces el amor, la admiración o el respeto que condicionaba mi pensamiento, pero aún así no pude encontrar el defecto que empañara mi percepción de esa señora tan querida que ayer Domingo 5 de Abril en nuestra iglesia santo tomas le dimos el ultimo adiós de lo que fue su vida clara y cristalina. Mucha gente de Villanueva y de Valledupar donde era tan apreciada y querida, la acompaño a su última morada. Nuestro Alcalde Luis Erasmo Dangond y la Gestora del Municipio Ruby Quintero de Dangond; el Ex Alcalde de Villanueva Jorge Juan Orozco y señora; el Ex Contralor General de La República Aníbal Martínez y Señora; el secretario General de Fedegan Jaime Daza Almendrales, el ex Gobernador de La Guajira Luis Felipe Ovalle Isaza, el Ex Senador Miguel Villazon Quintero, el dirigente político por el magdalena Darío Dangond Martínez, el Asesor del La Gobernación del Cesar Indalecio Dangond Baquero, el Dirigente Ganadero por el Cesar Celso Castro Castro y señora, el Fiscal Especializado por Valledupar Iván Rodríguez Bolaño, entre otros de las personalidades que estuvieron en el sepelio de la matrona Villanuevera.
Doña Blanca que había nacido el 11 de Junio de 1928, nos deja un legado inestimable, nos deja recuerdos gratos y entrañables, fe de esto pueden dar sus amigas que como todas las tardes concurrían donde doña paulina daza Lafaurie y allí expresaban a través del juego la amistad sincera y duradera junto con dona Lucila Daza, Elisa Clara David, Ocha Daza Crespo, Pema Dávila, entre otras. Doña Blanca también nos deja enseñanzas de vida y ejemplos para imitar.
No sé que produce más felicidad en los vericuetos del amor: dar o recibir, pero si se que en la familia Dangond Martínez siempre existió y ha existido una simbiosis perfecta del amor. Dan tanto como reciben. Como don Hernando realizaron un matrimonio feliz y exitoso. Hoy él queda solito, sin la compañera sin par, sin la esposa abnegada y la amiga ejemplar. Ellos hicieron la interacción perfecta del amor, para entender que es el amor, en donde está la ternura, como se expresa la bondad, solo habría que asomarse al hogar que ellos conformaran con ilusión de vida. Qué hermoso ver y observar un hogar que ellos conformaron con esos vericuetos del amor. Ejemplos para imitar, para los de hoy.
Gracias doña blanca por su amistad, por tantas cosas buenas, gracias por sus oportunos consejos por su vida. Ahora es tiempo de descansar en paz, porque nunca es tarde para morir en abril cuando se muere bien. Paz en su tumba.
Tuvo las condiciones todas de las grandes mujeres Villanueveras, cumplió su ciclo con inefable grandeza. Heredó un pasado, construyó un presente y nos legó un futuro. Inspiró su vida en su ancestral herencia, provenía de distinguidas familias Villanueveras. Don José Manuel Martínez y doña ROSA QUINTERO de MARTINEZ -viejos patriarcas, adustos, generosos, laboriosos. Don José Manuel llegó a Villanueva desde muy joven y doña Rosa provenía de familias santandereanas. Hicieron de ella su verdadera patria, la amaron como a nadie, jamás la hollaron, la engrandecieron con su laboriosidad y su entereza.
Doña Blanca Martínez de Dangond, construyó como pocas el presente de su vida, ella rindió culto a esos padres laboriosos, edificó una vida bien, le sirvió a Villanueva, le sirvió a su familia, le sirvió a sus amigos y amigas, es decir le sirvió a Dios. Era una mujer amable, de un carácter y de un temple para hacer negocios-lo heredo de su madre-era noble, sincera, amiga, fue una buena hija, inmejorable hermana, inigualable esposa y compañera, una madre irrepetible o si no que lo digan sus hijos que con el dolor y la congoja sentirán la ausencia de su consejera y amiga: José, Hernando, sirty y Daniel. Como empresaria del campo, mantuvo siempre definidos conceptos de rectitud e integridad. Al lado de sus hermanos don Juan Manuel y Doña Pacha Martínez Quintero, mantuvo una hermandad y una amistad que solo hoy la separa.
Muchas veces la observé caminar pausadamente y muchas veces también me pregunté al observarla si era posible encontrarle un solo defecto a esa señora tan querida que desde niño percibí como una señora de bien al lado de sus hijos que han sido mis amigos en todas las épocas, especialmente Daniel con quien me unen lazos de hermandad. Debo confesar que racionalice muchas veces el amor, la admiración o el respeto que condicionaba mi pensamiento, pero aún así no pude encontrar el defecto que empañara mi percepción de esa señora tan querida que ayer Domingo 5 de Abril en nuestra iglesia santo tomas le dimos el ultimo adiós de lo que fue su vida clara y cristalina. Mucha gente de Villanueva y de Valledupar donde era tan apreciada y querida, la acompaño a su última morada. Nuestro Alcalde Luis Erasmo Dangond y la Gestora del Municipio Ruby Quintero de Dangond; el Ex Alcalde de Villanueva Jorge Juan Orozco y señora; el Ex Contralor General de La República Aníbal Martínez y Señora; el secretario General de Fedegan Jaime Daza Almendrales, el ex Gobernador de La Guajira Luis Felipe Ovalle Isaza, el Ex Senador Miguel Villazon Quintero, el dirigente político por el magdalena Darío Dangond Martínez, el Asesor del La Gobernación del Cesar Indalecio Dangond Baquero, el Dirigente Ganadero por el Cesar Celso Castro Castro y señora, el Fiscal Especializado por Valledupar Iván Rodríguez Bolaño, entre otros de las personalidades que estuvieron en el sepelio de la matrona Villanuevera.
Doña Blanca que había nacido el 11 de Junio de 1928, nos deja un legado inestimable, nos deja recuerdos gratos y entrañables, fe de esto pueden dar sus amigas que como todas las tardes concurrían donde doña paulina daza Lafaurie y allí expresaban a través del juego la amistad sincera y duradera junto con dona Lucila Daza, Elisa Clara David, Ocha Daza Crespo, Pema Dávila, entre otras. Doña Blanca también nos deja enseñanzas de vida y ejemplos para imitar.
No sé que produce más felicidad en los vericuetos del amor: dar o recibir, pero si se que en la familia Dangond Martínez siempre existió y ha existido una simbiosis perfecta del amor. Dan tanto como reciben. Como don Hernando realizaron un matrimonio feliz y exitoso. Hoy él queda solito, sin la compañera sin par, sin la esposa abnegada y la amiga ejemplar. Ellos hicieron la interacción perfecta del amor, para entender que es el amor, en donde está la ternura, como se expresa la bondad, solo habría que asomarse al hogar que ellos conformaran con ilusión de vida. Qué hermoso ver y observar un hogar que ellos conformaron con esos vericuetos del amor. Ejemplos para imitar, para los de hoy.
Gracias doña blanca por su amistad, por tantas cosas buenas, gracias por sus oportunos consejos por su vida. Ahora es tiempo de descansar en paz, porque nunca es tarde para morir en abril cuando se muere bien. Paz en su tumba.
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