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| "A esta clínica San Juan fue ingresado el menor la noche del pasado domingo" |
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| "En esta parte del interior del vehículo Greter Acsota patrullera de la Policía adscrita al municipio de La Jagua del Pilar encontró al bebé y posteriormente fue llevado a la Clínica San Juan" |
Por: Didier Hernández/ Twitter@villanueva24h/ ahora en Instagram
En el
lugar de los hechos acaecidos el pasado domingo en horas de la noche, entre los
Municipios de la Jagua del Pilar y el corregimiento de Varas Blancas,
jurisdicción del municipio de la Paz – Cesar, donde fueron asesinados los jóvenes
comerciantes Deimer Torres y Yulieth
Acosta, hubo un momento de profundo sentimiento cuando la patrullera Greter
Acosta Ramírez de la Policía Nacional acompañada por el patrullero Luis
Vangrieken y el comandante de la estación del municipio de La Jagua del Pilar, Intendente
Jefe Alirio López, tuvieron en sus brazos arrullando al infante que se salvó
del atentado y que viajaba con sus padres en el vehículo donde se presentó el
doble asesinato, que conmovió al departamento de La Guajira.
Greter
Acosta, patrullera comunitaria del municipio de La Jagua del Pilar, relató que “llegamos
hasta el lugar donde se cometió el crimen, el infante de solo 10 meses se
encontraba durmiendo, de pronto por el golpe que recibió a la altura de la
frente; al llegar al lugar rápidamente nos dimos cuenta de que estaba
respirando”, dijo la patrullera
comunitaria.
Asimismo
“al momento de saber que estaba con vida, procedimos a despojarlo de su ropa ya
que está llena de sangre; lo abrigamos, llamamos a la unidad de Infancia y
adolescencia quien se puso al frente de la situación y fue cuando lo
trasladamos hasta la Clínica San Juan, donde le prestaron los primeros auxilios,
lo revisaron y la unidad de la Policía hizo el acompañamiento junto al personal
del ICBF, mientras que llegaban los familiares”.
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| "Patrullera, Greter Acosta Ramírez de la Policía Nacional adscrita al municipio de La Jagua del Pilar" |
La
patrullera Acosta Ramírez fue enfática al decir que “el menor no presentó
ninguna clase de novedad de mayor complicación, el Bienestar Familiar realizó
los trámites para saber quién se queda con la custodia del bebé”.
El Traslado del menor
“Al
momento de llegar al sitio donde ocurrió el asesinato, nosotros dimos parte al
Distrito San Juan, desde donde enviaron la unidad móvil de Infancia y
Adolescencia, al momento fue muy duro. Cuando nos acercamos al vehículo
pensábamos que el niño estaba sin vida, mientras que mis compañeros revisaban
el interior del carro observamos que el niño empezó a respirar y a llorar y fue
ahí que los momentos del procedimiento fueron muy difícil, tuvimos la valentía
de ayudarlo y salvarle la vida, lo despojamos de lo que tenía y lo abrigamos, demoramos
un tiempo prudente mientras que la unidad llegara”.
Acosta
Ramírez además habló de la posición en que se encontraba el niño, estaba a un
lado del padre y estaba dormido producto de tanto llorar y por el golpe que
recibió.
La experiencia durante el proceso
La patrullera
afirmó que dicha situación ha sido las más penosa desde que labora como
uniformada de la Policía Nacional.
“Es
difícil, la verdad es que cuando llegamos al lugar fueron momentos de rabia e
impotencia al ver el estado en que estaba el infante, el corazón de uno como
adulto se entristece y a la vez es de mucha nostalgia al ver que sus dos padres
estuvieran ahí. Es grato en el sentido de que logramos nuestros objetivos al
momento de arrullarlo y de ser alimentado, y son cosas que en nuestro quehacer
diario nos hemos acostumbrado y con el tiempo de estar en la Institución
Policial es el primer caso que me sucede con un menor en esa situación”, dijo
la uniformada.
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