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| "Kéiver Alexander Oñate Pérez, fallecido" |
Por: Didier Hernández/ Twitter@villanueva24h
En un alto estado de alicoramiento falleció el pasado viernes, en el municipio de La Jagua del Pilar, el joven Villanuevero Kéiver Alexander Oñate Pérez, de 24 años de edad, quien vivía con sus padres Julio Alberto Oñate Ortiz y Marelvis Pérez Millian, en el barrio Catorce de Junio, del municipio de Urumita.
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| "En este lugar fue hallado sin vida el cuerpo de Kéiver Alexander Oñate Pérez" |
Kéiver había salido con dos amigos hacia La Jagua del Pilar, municipio donde residía su novia, a quien pretendía visitar. Allá también iban a festejar la salida del nuevo compacto musical de Silvestre Dangond y Rolando Ochoa, ‘La novena batalla’.
En medio del festejo y los tragos que habían ingerido en el curso de día, los jóvenes llegaron hacia las 4:00 p.m. al billar La Tranquilidad, donde estuvieron por espacio de dos horas, mientras llovía torrencialmente en todo el área. Cuando amainó la lluvia partieron con el propósito de visitar a la novia de Kéiver, para lo cual debían cruzar el arroyo llamado Loma Fresca que atraviesa el casco urbano de La Jagua del Pilar.
Los tres jóvenes amigos, bastante tomados, trataron de cruzar arroyo que estaba muy caudaloso por el aguacero caído poco antes.
Los jóvenes ingresaron a la corriente pero no contaron con que la fuerza de agua podía arrastrarlos. Dos de ellos lograron salirse, pero Kéiver, probablemente un poco más alicorado que sus compañeros, no pudo evadir la corriente, que lo tumbó y lo arrastró durante varias decenas de metros.
Los amigos, en medio de la oscuridad, trataron de alcanzar a Oñate Pérez, lo cual se les hizo imposible.
El cuerpo de joven quedó atrapado en una especie de box-coulvert estrecho que encausa las aguas del arroyo. A pesar de que aún estaba con vida, le fue imposible salir de la corriente toda vez que su cuerpo quedó atravesado en el canal e inmovilizado por gruesos troncos y frondosos ramajes que arrastraba el arroyo.
El cuerpo del infortunado joven, que no alcanzó a visitar a su novia, fue sacado poco después por improvisados rescatistas y los amigos. Ya había perdido la vida.
El sepelio del Kéiver se realizó en el municipio de Urumita, el pasado sábado en horas de la tarde, en medio de la tristeza de sus padres, hermanos, familiares y amigos que le dieron el último adiós
En medio del festejo y los tragos que habían ingerido en el curso de día, los jóvenes llegaron hacia las 4:00 p.m. al billar La Tranquilidad, donde estuvieron por espacio de dos horas, mientras llovía torrencialmente en todo el área. Cuando amainó la lluvia partieron con el propósito de visitar a la novia de Kéiver, para lo cual debían cruzar el arroyo llamado Loma Fresca que atraviesa el casco urbano de La Jagua del Pilar.
Los tres jóvenes amigos, bastante tomados, trataron de cruzar arroyo que estaba muy caudaloso por el aguacero caído poco antes.
Los jóvenes ingresaron a la corriente pero no contaron con que la fuerza de agua podía arrastrarlos. Dos de ellos lograron salirse, pero Kéiver, probablemente un poco más alicorado que sus compañeros, no pudo evadir la corriente, que lo tumbó y lo arrastró durante varias decenas de metros.
Los amigos, en medio de la oscuridad, trataron de alcanzar a Oñate Pérez, lo cual se les hizo imposible.
El cuerpo de joven quedó atrapado en una especie de box-coulvert estrecho que encausa las aguas del arroyo. A pesar de que aún estaba con vida, le fue imposible salir de la corriente toda vez que su cuerpo quedó atravesado en el canal e inmovilizado por gruesos troncos y frondosos ramajes que arrastraba el arroyo.
El cuerpo del infortunado joven, que no alcanzó a visitar a su novia, fue sacado poco después por improvisados rescatistas y los amigos. Ya había perdido la vida.
El sepelio del Kéiver se realizó en el municipio de Urumita, el pasado sábado en horas de la tarde, en medio de la tristeza de sus padres, hermanos, familiares y amigos que le dieron el último adiós
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