El ultimo adiós para Luis Fernando Oñate Rolong, estuvo bañado en lagrimas, dolor y sufrimiento, sus familiares especialmente su padre, no entendía, como una persona, que apenas quería iniciar con fortaleza su vida laboral, el destino le haya jugado una mala pasada, convirtiéndola en una de las víctimas mortales del fatal accidente de tránsito en donde otras cuatro personas perdieron la vida.
El pasado 28 de Septiembre su cuerpo fue sepultado en el cementerio central de su natal Villanueva. En esa misma tierra en donde había vivido sus sueños de lograr un trabajo en las minas del complejo carbonífero del Cerrejón. En donde termino sus estudios, para luego continuar su especialización en motores diesel. En donde escucho música vallenata al son de una parranda con sus inolvidables amigos.
Luis Fernando Oñate Rolong, de 23 años de edad oriundo de Villanueva. Iba en la parte delantera del vehículo accidentado que lo recogió para así transportarse hasta la capital Guajira Riohacha. La joven victima residía en la calle 9 Casa marcada con el número 10-38 en el barrio los Ángeles de Villanueva.
Elmer Oñate, padre de la victima reconoció que el joven lo llamó muy temprano, para decirle que viajaría a Riohacha, para realizar los trámites de la libreta militar.
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