Beneficiarios del programa establecieron el monto para obtener los productos: manifestó Henry Vargas coordinador del programa en el sur de la Guajira

Por: Didier Hernández

Después de darse a conocer las anomalías que hasta la actualidad se han venido presentando en el municipio de Villanueva con el programa alimentario Guajira sin Jamushiri debido a los cobros que se les realizan a cada una de las madres de mil pesos por niños más 500 pesos por carpetas liderado por el gobernador Jorge Pérez Bernier, Diario del Norte logró conocer las versiones del coordinador general en el sur del departamento Henry Vargas Rincón donde manifestó que la comunidad fue la que se coloco de acuerdo para lograr tener acceso a las leches, el paquete de bienestarina y al paquete de galleta el cual es un programa que se viene realizando por “Desayunos infantiles con Amor” en el municipio de Villanueva, el cual es lo único que se les están entregando a las familias beneficiarias del programa bandera del gobernador Guajira sin Jamushiri.

Hay que destacar, que el trabajo que se está haciendo durante este semestre del 2010 es un trabajo meramente por amor a la comunidad aquí nadie esta devengando un peso. De igual manera Vargas además indicó que los veedores famosísimos que han resultado en estos momentos en el municipio hicieran de igual forma algunas preguntas e indagaran sobre el programa, y que no solamente hagan las denuncias sino que se informen cómo funciona el programa. Hace 6 meses nosotros no trabajamos debido a la ley de garantías que nos han impedido recibir nuestros sueldos y tampoco se nos va hacer efectivo el tiempo que se nos han perdido donde las fundaciones o las ONG operadoras en estos momentos no tienen como subsidiar transportes a las comunidades para poder llevarle los alimentos correspondientes a cada uno de los niños beneficiarios del programa que entre otras cosas es bastante grande debido a que se les están entregando una caja de leche equivalente de 54 mil pesos que corresponden a 27 unidades, la misma cantidad de galletas y lo mismo que la bienestarina el cual es el complemento alimenticio para los beneficiarios del programa.

Las comunidades, bien lo dice el programa, deben subsidiar estos programas de alguna manera, deben de realizar convenios e incluso ayudar en la dotación de cada uno de los comedores para que estos programas funciones obviamente los beneficiarios serian los padres de familias de cada uno de los sectores vulnerables los cuales se encuentran estos comedores, donde algunas familias se colocan de acuerdo con unas tarifas para ellos pagar el transporte los cuales lo asumían anteriormente la ONG y aun donde estamos en la época los cuales se nos están cancelado nuestro trabajo tampoco existen subsidios para el transporte de alimentos, nuestra bodega se encuentra ubicada en la casa de la cultura “Rafael Antonio Amaya” donde llega una tractocamion bajan las cantidades de leches que son distribuidas en todos los 15 municipios los cuales existe el programa y de allí en adelante le corresponde a las ONG donde por el contrario deberían de venir todos los beneficiarios acá para evitar estos tipos de inconvenientes, pero ellos son los que deciden si pagan su transporte o lo realizan ellos directamente a través de la bodega.

Para Henry Vargas Rincón el manejo de cada producto es lo elemental donde lo último que llega debe de ser lo último que sale debido a que aquí no existe estos inconveniente en cuanto a la rotación del producto, donde tenemos 2.250 niños los cuales están distribuidos en el municipio del Molino, Urumita, la Jagua del Pilar y Villanueva donde llegan exactamente las mismas raciones como de tantos niños como raciones llegan donde no existen las mínimas posibilidades de que se pierdan los productos debido a que no tenemos estafe debido a que las planillas vienen elaboradas por el mismo I.C.B.F. para luego así entregarles tantos niños tenga la ONG como en el programa desayunos infantiles con amor.

Este producto principalmente es un producto UAT el cual viene en un empaque de alto valor recubierto de aluminio donde es imposible de incinerar donde la única forma de lograr incinerar este empaque es en un horno de altísimas temperaturas y aquí en el municipio de Villanueva no existe un horno todavía, este empaque se ha convertido en un problema no solamente para nosotros sino para el programa, para los transportadores y para los fabricantes del empaque debido a que no existe la forma de degradarlo debido a la necesidad que tiene la leche de permanecer mucho tiempo en bodega.