Por: Didier HernandezArribo a Villanueva Guajira, el cura párroco Bernabé Arismendi, un sacerdote que presto sus servicios en la Iglesia Santo Tomas en la década de los 80, donde cosecho muchos feligreses y amigos, obteniendo éxitos en su carrera sacerdotal.
Por cosas del destino el cura párroco tuvo que ausentarse del municipio, y radicarse nuevamente en su país natal España, donde ha estado muy atento a los acontecimientos en la Villa de Santo Tomas, patrono de los villanueveros y en su querido San Juan.
Bernabé, volvió de nuevo a esta tierra para rencontrarse con los suyos y celebrar sus 50 Años de vida sacerdotal.
El sacerdote, durante su llegada al municipio de Villanueva, expresó. “La gente creían que iban haber a un Berna pequeñito, gordito y viejito, pero bajito, gordito si, pero viejito no, sabéis que mi estadía aquí, para nosotros es que halla celebrado los 50 años de mi vida sacerdotal, y mis hermanos no dudaron en pagarme el viaje para que viniera a visitarlos a todos ustedes, antes he estado a donde un padrecito que vive en España y lo he visto como achacadito diciéndole a la gente “Erda Berna también va a venir acá, mas caído” pero no, todavía sigo pensando que todavía puedo tener un poco mas de chicha para unos cuantos años y sobre todo me acuerdo de vosotros cuando a mis feligreses les digo en el canto ensayando y les digo “Muchachos en Villanueva hoz diría que les faltan chicha para cantar”.
Habido momentos que los he tenido muy presentes, circunstancia y detalles muy pequeños que me dejo mi querida Villanueva y mi querido San Juan, los cuales fueron años que viví muy sabroso. Hace poco cuando vine a Colombia, estuve dos días en Valledupar y un día estuve en un seminario y les decía a los sacerdotes a los jovencitos, “Hoz esperan muchos días y años de vida sacerdotal porque el que sale de la diócesis de Valledupar es un sacerdote que se hace querer porque vosotros sabéis querer”. Es una alegría inmensa al estar entre vosotros.
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