Las comunidades wayuú de Pagmana y Santa Cruz, en Manaure, están viviendo una crisis humanitaria debido al desbordamiento del río Ranchería, provocado por las fuertes lluvias caídas recientes. Aproximadamente 200 familias, incluidas mujeres embarazadas, lactantes y niños, se encuentran en una situación de extrema vulnerabilidad y están solicitando ayuda urgente a las autoridades nacionales, departamentales y municipales. Yanitza Magdaniel Ipuana, líder de las comunidades afectadas, hizo un llamado a la Gobernación de La Guajira, a la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (Ungrd) y a la Alcaldía de Manaure, solicitando el envío de asistencia para enfrentar la emergencia. “Necesitamos apoyo urgente para atender las necesidades básicas de nuestras familias, que están pasando por momentos muy difíciles,” expresó Ipuana. La situación es crítica, y la comunidad espera que las entidades locales y nacionales respondan de inmediato con recursos y asistencia humanitaria.
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