En el segundo día de paro. Madres Comunitarias del Sur de La Guajira alzan su voz, exigen pensión y reconocimiento a sus derechos

"Matilde Muegues, con 70 años de edad y 37 años dedicados al cuidado de la niñez"

Fuente: @villanueva24h/síguenos en Instagram, Youtube, Facebook, Threads y X (Twitter)

"Madres Comunitarias del Sur de La Guajira alzan su voz, exigen pensión y reconocimiento a sus derechos"

NOTICIA: En una emotiva protesta, varias madres comunitarias de los centros comunitarios del Sur de La Guajira alzaron su voz en su segundo día de paro nacional para exigir el reconocimiento de sus derechos, entre ellos una pensión justa y mejores condiciones laborales.

Las trabajadoras, muchas de ellas mayores de 70 años, han dedicado gran parte de sus vidas al cuidado de niños, y sienten que su esfuerzo ha sido ignorado por las autoridades. 

Matilde Muegues, con 70 años de edad y 37 años dedicados al cuidado de la niñez, expresó que “estamos reclamando nuestros derechos, ya que han sido vulnerados durante todo este tiempo. Necesitamos que nuestros derechos sean resarcidos. No es justo que, estando en- fermas, sigamos trabajan- do sin el reconocimiento que merecemos”. 

Por su parte, María Mercedes Sedán López, quien ha trabajado desde la fundación de los hogares comunitarios desde 1988, también alzó su voz. 

“Tengo 74 años de edad y 36 de trabajo. Ya no puedo más, pero sigo atendiendo a los niños, aunque es demasiado. Tienen que resolver nuestra situación, los niños no son culpables de nada, pero esto es una causa justa”. 

Las madres comunitarias han expresado que están dispuestas a apoyar el paro y continuar luchan- do por el reconocimiento de sus derechos laborales. 

Hilda Díaz, otra de las trabajadoras, quien lleva 33 años al frente de la niñez, señaló que “a la edad que tengo y estando enferma, quiero que nos ayuden a nosotras las mayores, para que las nuevas generaciones puedan tomar el relevo”. 

Estas mujeres, pilares fundamentales del bienestar infantil en la región, hacen un llamado urgen- te a las autoridades para que respondan a sus demandas, que incluyen una pensión digna, dotaciones adecuadas y el respeto a sus años de servicio. 

Enfatizan que no solo luchan por ellas, sino también por los niños de Colombia, quienes merecen un cui- dado adecuado y condiciones de vida dignas. 

El paro continúa y las madres comunitarias esperan una pronta respuesta del Gobierno a sus legítimas demandas.